Comparación de precios: la práctica dicta el nuevo comportamiento del consumidor

Comparar precios es una práctica común entre consumidores de diferentes perfiles sociales. Ve por qué es importante hacerlo y cómo mantener este hábito.

La información sobre los precios debe estar disponible para los consumidores en cualquier momento de la compra, sea en línea o en la tienda. A partir del precio, los consumidores pueden elegir el producto que más atiende a sus necesidades.

Un ejemplo de eso es cotizar seguros. Antes de elegir, es necesario no sólo comparar precios sino también las características de los productos. Ve por qué es importante hacer eso y cómo mantener este hábito en tu rutina.

El hábito de comparar precios

Según una encuesta de Wiser hecha con más de 1.200 personas, el 96% de los participantes planean comparar los precios antes de comprar algo. El primer paso es mantenerse actualizado sobre los cambios de precios y las promociones antes de elegir un producto.

Cuando la compra es hecha en línea, el 93% de los consumidores comparan precios antes de comprar. Una curiosidad según esta encuesta es que un 25% lo hace después, para comprobar que pagaron un buen precio.

Otra encuesta, realizada por el site acierto.com, apunta que casi ⅔ de quienes comparan precios finalizan la compra por Internet, que sirve como herramienta para informarse y reducir costes. Esto vale para productos y servicios de diferentes áreas, como viajes, tecnología (ordenadores, teléfonos móviles etc.), salud, ropa, libros, electrodomésticos, alimentos, entre otros ejemplos.

El mejor canal de venta

Saber cual es el mejor canal de venta para cada tipo de producto es esencial para ahorrar dinero y hacer un buen negocio. Pero es importante analizar no sólo el precio, sino también como cada canal te permite tener más detalles del producto.

Un ejemplo son ropas y calzados. Tener la posibilidad de poner los productos te da más seguridad para hacer la compra sin preocupaciones. Por eso, mucha gente busca estos tipos de productos en línea  y decide ir a una tienda física a realizar la compra.

Sin embargo, productos como libros y viajes pueden ser comprados con toda tranquilidad en línea (si encuentras códigos promocionales, puedes reducir aún más los costes).

Además de plataformas de busca y aplicaciones para móviles, los consumidores también buscan descuentos y comparan precios a través de su red familiares y amigos.

Después de la pandemia, la compra en línea es cada vez más popular. Algunas ventajas de comprar en línea son el acceso a información adicional y descuentos, el ahorro de tiempo y la comparación de diferentes opciones rápidamente.

Los comparadores de precios online son la herramienta más frecuente. Los portales web ofrecen la posibilidad de comparar los precios de un mismo producto en diferentes empresas. Los productos tecnológicos son los más comprados en línea. Hay también herramientas virtuales para comparar la evolución de los precios, que ayudan potenciales clientes a buscar campañas de descuento de las marcas.

Perfil del consumidor

Diferentes encuestas investigan si hay un perfil de consumidor que más compara precios antes de comprar. Los resultados muestran que el género y la edad son factores que influyen en este proceso.

Por ejemplo, el 70% de los hombres con menos de 25 años (un 14% más que ellas) tienen este hábito. Otra estadística importante es que un 26,7% de las mujeres menores de 25 años utilizan Internet para consultar y comparar precios, pero  finalizan la compra en una tienda física (este número entre los hombres es de un 19,6%). Para los hombres con edad entre 55 y 65 años, 4 de cada 10 prefieren comprar  físicamente después de comparar online. Entre mujeres con esta edad, esta estadística es de 25,81%.