El animal más alto del planeta, la jirafa

La jirafa es el animal más alto del mundo, y además, como si fuera poco, es uno de los pocos animales que puede enfrentarse a un león. De verdad que es uno de los animales más asombrosos que existen y uno de los que más admiración se ha ganado.

A pesar de su tamaño y fuerza, son muy pacíficos y prácticamente se dedican a comer hojas altas de los árboles. A continuación, podrás saciar todas las dudas que tengas con respecto a este gran animal.

Conociendo a las jirafas

Su nombre científico es Giraffa Camelopardalis y pertenece a la familia de los artiodáctilos, estos son animales ungulados con un par de dedos en sus extremidades.

Las características de las jirafas hacen que sea un animal muy específico. Su cuello es asombrosamente largo lo que les permite llegar a las horas más altas y tiernas de los árboles.

Además, sus patas delanteras también son más largas que las traseras, lo que las estira un poco más. Su pelaje típico es de color amarillo con manchas oscuras y su lengua es negra.

Su sistema sanguíneo es bastante curioso porque les permite llevar la sangre a todo el cuerpo, incluyendo a lo alto de su cabeza.

Suelen vivir en la zona meridional y central del continente africano. Sin embargo, por la actividad humana, la distribución de las jirafas cada vez es más reducida. Actualmente, casi son inexistentes en la parte oriental del continente.

Por lo general, estos animales conviven en manadas de 20 o 30 ejemplares. Sus lugares favoritos son las praderas y las llanuras y pueden abarcar un territorio de hasta 50 millas cuadradas.

Las jirafas son animales de zonas cálidas, pero también pueden adaptarse con facilidad a cualquier otro tipo de clima y también pueden compartir con otras especies sin problema alguno.

Un animal pacífico

Las jirafas son animales de cuatro estómagos, es decir, son rumiantes. Tienen una digestión más lenta que el resto de los animales y gracias a sus características físicas pueden llegar a las copas de los árboles con mucha facilidad.

Su lengua es insensible a las espinas y pueden alimentarse de gran cantidad de hojas y frutas. Sus favoritos son esos brotes jugosos y tiernos que están en lo alto de los árboles.

Su alimentación principalmente se basa en dos árboles muy presentes en las llanuras africanas: la mirra y la acacia. En promedio, las jirafas deben comer 65 kilos de alimentos al día.

En cuanto a la reproducción de las jirafas, ésta se da a partir de los seis años, cuando alcanzan la madurez sexual. Los machos degustan la orina de las hembras y así determinan cuándo están listas para aparearse.

La gestación puede tomar hasta 15 meses y siempre será una sola cría por parto. La jirafa da a luz de pie y las crías caen al suelo protegidas por un saco amniótico. Esta cría nace con 1.80 metros de altura.

A las pocas horas de haber nacido ya pueden caminar y correr sin ningún tipo de problema, sin embargo, permanecen junto a la madre las primeras semanas de vida, para protegerse de los depredadores.

Estos animales a pesar de ser los más altos del mundo no son agresivas, más bien son seres bastante tímidos. En sus grupos no hay jerarquía ni coordinaciones de ningún tipo, aunque si hay una amenaza, los ejemplares se defienden en conjunto.

Peligro de extinción

Hoy en día, en gran parte de África, las jirafas están siendo perseguidas y cazadas salvajemente. A pesar de todos los esfuerzos para conservarlas mediante aportes, organización y con la creación de refugios naturales o parques protegidos, la cifra de jirafas es cada vez más reducida.

Algunos científicos apuntan a que en un futuro muy lejano, es una especie que podría desaparecer.

Datos interesantes

• La lengua de las jirafas alcanza los 50 cm de longitud.
• Sus manchas oscuras en la piel, son como las huellas dactilares en los humanos. Son únicas en cada ejemplar.
• Las jirafas toman muy poco agua, pero cuando lo hacen su circulación no se concentra en la cabeza, sino que sigue recorriendo todo el cuerpo.

Definitivamente son uno de los animales más sorprendentes del mundo.