Fueron a hacer surf y acabaron salvando a una cría de ballena
Los océanos ocupan la mayor parte de la superficie del planeta. En ellos hay miles de formas de vida, cientos de animales que día a día nadan, comen, socializan, se reproducen, cazan o descansan. Peces y mamíferos compartiendo miles de kilómetros de costa y mar.
En algunas ocasiones, los habitantes de los mares se ven en peligro. Unas veces, es el mismo ser humano quien amenaza sus vidas con costumbres bárbaras que exterminan muchas criaturas o con ridículas fotos que acaban por matar a un delfín, por ejemplo. Pero en, otras ocasiones, es también el hombre quien salva de la muerte a cuantos animales puede.
Una cría de ballena tuvo la mala fortuna de quedarse varada en una de las playas de Costa Rica. Por suerte, ese mismo día, unos surfistas estaban por allí. Mauricio Camareno y su amigo vieron un bulto extraño sumergido en el agua. A medida que se acercaron, empezaron a escuchar gemidos.
El pobre animal luchaba por salvar su vida. Según el surfista, estaba ya agotada y casi ni se mantenía a flote.
Los amigos renunciaron a su día de surf y se metieron de inmediato en el mar con la pequeña ballena.
Usando la fuerza, consiguieron arrastrarla a aguas más profundas. Pero tuvieron que sostenerla en brazos para que pudiera respirar, porque el bebé se hundía, literalmente.
Durante más de 6 horas, este equipo de rescate sostuvo a la ballena para permitirle recuperar sus fuerzas. Afortunadamente, dio resultado y, al final, la cría pudo nadar por sí misma una vez que estuvo mar adentro.
Buenas acciones como esta son las que dan sentido a la convivencia entre humanos y animales. Y son un maravilloso ejemplo a tener en cuenta.
Fuente: The Dodo / Fotos: Noticias del Puerto