La espondilosis en perros

En esta ocasión vamos a hablar de la espondilosis en perros, una enfermedad degenerativa más frecuente de lo que podamos imaginar, de manera que es importante conocer todas sus particularidades y características, las razones por las que se desarrolla, descubrir los síntomas que nos permitirán su identificación, y por supuesto también aprenderemos a prevenirla.

Qué es la espondilosis en perros

Se conoce como espondilosis en perros a una enfermedad de tipo deformante y degenerativa, en la que la columna vertebral va formando espolones óseos en las vértebras tanto en su parte superior como en la inferior y laterales.

Es una enfermedad no inflamatoria que se desarrolla debido al crecimiento del hueso.

Razones por las que se produce

Comentábamos que la razón por la que se desarrolla la espondilosis en perros es por el crecimiento del hueso, pero dicho crecimiento se puede ver alterado por cuatro factores principales que son:

• Lesiones previas: puede deberse a microtraumatismos repetidos o traumas importantes que se han producido en un momento determinado.
• Envejecimiento: cuanto mayor sea la animal, más posibilidades tendrá de desarrollar la espondilosis deformante.
• Sobrepeso: los animales que viven durante muchos años con sobrepeso, tendrán una mayor tendencia a desarrollar la enfermedad.
• Hereditario: también es posible que el animal tenga una mayor predisposición al desarrollo de espondilosis por herencia.

Cabe destacar que los perros que tienen una mayor tendencia a desarrollar espondilosis son aquellos que pertenecen a las conocidas como razas grandes.

Síntomas más habituales de la espondilosis en perros

Es muy importante aprender a conocer cuáles son los síntomas más frecuentes de la espondilosis en perros, ya que de esta forma será más fácil poder detectar el desarrollo de la enfermedad para actuar lo antes posible:

• Se observa una rigidez superior a lo normal en la zona de la columna vertebral.
• En algunos casos, el perro sentirá dolor cuando presionemos sobre su columna.
• También verá reducida su capacidad de movimiento.

Cómo prevenir la enfermedad

La mejor forma de prevenir la espondilosis en perros es teniendo en cuenta las causas por las que se produce, de manera que consideraremos lo siguiente:

• Es muy importante evitar el sobrepeso.
• Se deberá garantizar una dieta variada y completa nutricionalmente.
• El animal debe tener un lugar cómodo en el que dormir.
• El ejercicio deberá ser progresivo, de manera que un perro que no sea muy activo, no es aconsejable someterlo a sobrecargas innecesarias.

Tratamiento de la espondilosis deformante en perros

Antes de tomar una decisión, el veterinario deberá realizar un examen neurológico con el objetivo de estudiar la presencia y evolución de la enfermedad.

En este sentido nos podemos encontrar con dos casos que son:

• Daños mínimos: en el caso de que los daños sean reducidos, que es la situación más habitual siempre y cuando se detecte a tiempo, se realizará un tratamiento que combina el reposo con el consumo de analgésicos. También se recomienda la utilización de abrigos térmicos o fajas de columna para perros.
• Daños elevados: si se ha desarrollado una patología de columna que requiera cirugía debido a daños en el nervio y en los tejidos o a la presencia de dolores intensos en el animal, el perro deberá ser hospitalizado para prepararlo para la intervención.

Tal y como se puede observar, la espondilosis en perros es un problema bastante común pero que, si se detecta a tiempo, precisa de un tratamiento simple y rápido, mientras que si se deja evolucionar, puede llegar a una situación mucho más complicada y que suponga un fuerte dolor al animal y un importante gasto veterinario.

Es por ello que se recomienda estar atentos a los síntomas indicados previamente, con el objetivo de detectar el posible desarrollo, y esto será especialmente importante cuando se trate de perros de avanzada edad y de razas grandes, con lo cual se buscará reducir al mínimo el desarrollo de la enfermedad y actuar sobre ella lo antes posible.