Cayó recién nacida, su suerte no parecía buena hasta que se encontró con dos grandes personas

La caía del nido puede suponer el final de las aves recién nacidas. Afortunadamente, esta cría de pájaro cantor rayado fue encontrada milagrosamente por el hermano de un veterinario, mientras este salía a hacer un poco de deporte.

Ambos, documentaron día a día, la increíble recuperación de este pájaro bebé.

Día 1 - Este es su primer día. Fue encontrada con trozos de cáscara y restos de membranas de su propio huevo todavía pegados a su cuerpo. No fue posible localizar el nido por lo que lo llevamos a casa. Si encontráis a una cría en semejantes condiciones, hay que intentar encontrar su nido y colocarlo de nuevo. Sino es posible, lo mejor es dárselo a un especialista para que intente sacarlo adelante.

Día 2 - Mantuvimos al pollito en una incubadora, controlando cuidadosamente la humedad y la temperatura. Decidimos que era una hembra (aunque nunca fuimos capaces de averiguar si era macho o hembra), y la llamamos "Bombón".

Día 3 - Los pájaros bebés comen mucho y muy a menudo. La alimentamos principalmente con grillos, gusanos de la harina, insectos capturados y una fórmula liquida especial para ellos. Comía cada media hora durante 14 horas al día, simulando a lo que ingeriría en su hábitat natural.

Día 4 - Puedes ver el increíble desarrollo de las plumas en apenas unos días. Comenzó también a pedirnos la comida cada 30-45 minutos. Una nota interesante: es increíble el instinto de estos animales, incluso con los ojos cerrados tenía la coordinación suficiente como para colocarse al borde del nido y hacer sus necesidades fuera. Así mantenía el nido limpio.

Día 5 - Ahora era capaz de sentarse con las piernas dobladas bajo su cuerpo demostrando una mayor estabilidad. En solo 24 horas las plumas ya habían cambiado una vez más, de manera notable. Ahora empezaba a aparecerse más a un pájaro. Sus ojos también comenzaron a abrirse.

Día 6 - Esta es una buena fotografía donde poder ver el gran desarrollo de las plumas. Como van creciendo cada día más.

Día 7 - Durante la noche, todas las plumas emergieron y ¡tachán! Tenemos un pájaro.

Día 8 - " ¡¡ALIMÉNTEME !! " Llegados a este punto, ella era capaz de comer 3 grillos de gran tamaño.

Día 9 - Como ya tenía el cuerpo lleno de plumas, dejamos de utilizar la incubadora. Ya era capaz de regular su calor corporal por sí misma. Entre sus mechones de pelusa y la expresión como de enfado característica de las crías de aves, hacía que su cara fuera de lo más hilarante.

Día 10 - La mudamos a una jaula más convencional y le dimos materiales para que comenzara a explorar. Ella estaba muy feliz, a pesar de su expresión.

Día 11 - Por primera vez, fue capaz de posarse. Sin duda, un gran paso hacia la dirección correcta. Su equilibrio aún no es muy bueno. Sin embargo, su agarre es muy fuerte y podía sostenerse sobre la rama perfectamente.

Día 12 - Bombón es un pajarito muy dulce que disfruta posándose sobre nuestras manos. Puedes ver algunas semillas de mijo que brotan en el fondo. Forman parte de su nueva alimentación. Ahora con más componentes según sus necesidades actuales. Cada vez le damos de comer con menos frecuencia, cada 1 o 2 horas. También colocamos gusanos en la jaula entre el forraje para simular su hábitat natural.

Día 14 - Cada vez su físico va cambiando y pasando de ser un bebé a un pájaro más maduro. Ahora que ya tiene dos semanas de vida iré saltándome algún día.

Día 17 - Aquí está en una jaula más grande. Hemos puesto ramas recién cortadas para el ella pueda tener más variedad de zonas donde agarrarse y de explorar. Intentamos que crezca en un ambiente lo más similar posible a cómo lo haría en la naturaleza. Llegados a este punto, bombón ya es capaz de volar y saltar como una verdadera profesional.

Día 22 - Empezamos a colocar la jaula en el exterior para que estuviera expuesta al viento, el sol y otras aves. Esto es importante para la socialización. Las aves salvajes a veces se acercan a los comederos que tenemos fuera e interactúan con ella enseñándole sus canciones.

Día 23 - Esta es una de nuestras fotos favoritas. En ella se ve su plumaje con todo lujo de detalles. En este punto, parece pertenecer a la especie del gorrión coronano blanco o Chipping Sparrow. Ambos son aves migratorias por lo que rezamos para que estuviera a punto y se uniera en su momento a alguna bandada.

Día 25 - Otra vista preciosa de ella, esta vez de un lateral. Sus colores les proporcionarán un camuflaje perfecto entre los árboles.

Día 27 - En ese momento, no le interesaban en absoluto los grillos como parte de su dieta. Su alimentación se basaba en semillas y gusanos, fundamentalmente. Ya no hacía falta que la diéramos de comer, ella se bastaba solita perfectamente. Es una buena señal, se acercaba la hora de dejarla libre.

Día 29 - Le encantaban todas y cada una de las nuevas ramas que le ponemos en la jaula.

Día 33 - Estaba lista para soltarla pero decidimos esperar unos días ya que se avecinaban tormentas.

Día 36 - Después de unos días de tormenta, el día 36 amanece despejado. Decidimos que era el día perfecto por lo que la llevamos cerca de donde fue encontrado. En esa zona es común ver otros pájaros de su misma especie por lo que nos pareció un lugar idóneo para ella. ​​

Abrimos la puerta de la jaula y retrocedió. Después de unos minutos, saltó fuera y revoloteó hacia un árbol. No dudó ni un segundo, de inmediato comenzó a explorar las ramas, mordiendo los brotes de árboles y saltando de rama en rama, como un ave silvestre. Muy pronto la perdimos de vista.

Fuente: Wimp